Beneficios de correr: los mejores consejos para empezar
Salir a correr por la mañana puede darte el lleno de energía que necesitas para empezar el día con éxito, o puede la actividad ideal para terminar un largo y estresante día con una sonrisa y un cuerpo más sano.
El running se ha convertido en una pasión para millones de personas, si aún no entiendes el porqué te invitamos a que leas todo sobre sus beneficios.
Beneficios del running
Los beneficios de correr sobre nuestro cuerpo y mente son incontables y van desde cuestiones estéticas como la pérdida de peso a efectos sobre nuestra salud a largo plazo. Estos son solo algunos de ellos:
- Ayuda a adelgazar: dependiendo del peso, la velocidad y el tipo de terreno, se pueden llegar a quemar aproximadamente entre 235 y 450 calorías en media hora.
- Tonifica los músculos: correr mejora la condición física haciendo que trabajen y se tonifiquen muchos músculos del tren inferior y el core.
- Mejorar la resistencia al esfuerzo y aumenta la capacidad pulmonar. Al principio todo es más difícil, pero una vez le hayas cogido el ritmo, poco a poco notarás cómo mejora tu condición.
- Reduce el estrés: no debería ser ninguna novedad, pero, una vez te acostumbras, correr es extremadamente relajante y ayuda a equilibrar la mente.
- Fortalece el sistema inmunitario, haciéndote menos susceptible a enfermarte, siempre que descanses lo necesario para recuperarte plenamente y te alimentes correctamente.
- Mejora el sistema cardiovascular y la circulación: el entrenamiento cardiovascular que realizas cuando corres entrena y mejora el funcionamiento de tu corazón.
- Ayuda a prevenir la artritis al mejorar la producción de cartílago, volviéndolos más resistentes a la artritis.
- Estimula el cerebro y mejora el estado de ánimo: correr es un poderoso estimulante para nuestro cerebro.
- Aumenta la autoestima: salir a correr quiere decir dedicarle tiempo y tratar bien a nuestro cuerpo y hace que nos sintamos mejor con nosotros mismos.
- Mejora la condición de tus huesos: el ejercicio de alta intensidad, como el running, contribuyen a aumentar la densidad ósea y, por lo tanto, ayudan en la prevención de la osteoporosis.
Cómo empezar a correr
Si te has decidido a empezar a correr, ¡enhorabuena! Seguro te irán surgiendo un montón de dudas a medida que avanzas, a continuación te damos algunos consejos para que el comienzo sea un éxito.
¿Cuántas veces a la semana debo correr?
Si tu única actividad física será correr, lo ideal sería practicarlo un mínimo de tres y un máximo de cinco veces a la semana.
Empieza poco a poco
Escuchando los límites de tu cuerpo y aumentando la velocidad y las distancias gradualmente
¿Mal tiempo? No pasa nada
¿No pues correr fuera o no cuentas con un espacio agradable donde correr? Te recomendamos llevar el entrenamiento al interior: correr en cinta también te aportará estos beneficios.
Entrena en libertad
Lo bueno y motivador de correr es la flexibilidad que te da, ya que no dependes de ningún horario y puedes salir a correr a la hora que te convenga, sin estar atado a un lugar ni a determinado equipamiento más que tus propias piernas.
¿Qué zapatillas necesito?
Las zapatillas perfectas son aquellas que se adaptan a tus necesidades, que sean cómodas y tengan en cuenta la superficie donde vas a correr, tu tipo de pisada, la forma de tus pies y tu peso. Te recomendamos acudir a una tienda de deportes de confianza donde puedas probarte diferentes tipos de zapatillas y puedas contar con el consejo de expertos.
Acompáñalo de una dieta adecuada
Asegúrate de distribuir las calorías a lo largo del día, haciendo preferiblemente al menos cinco comidas al día. Recuerda consumir suficientes hidratos de carbono, sobre todo antes del ejercicio. Es fundamental no correr sin haber comido lo suficiente ya que necesitarás energía para poder rendir bien. De todas formas, mantén una dieta equilibrada y que la energía que consumes provenga de alimentos sanos y equilibrados.
Ten cuidado de no cometer errores que puedan provocar lesiones
Infórmate y practica una buena técnica desde el principio. También cabe recordar ir aumentando la velocidad progresivamente y no de forma brusca, alimentarse correctamente y descansar lo suficiente para una buena recuperación. Es muy importante estirar después de correr y mantenerse hidratado antes, durante y después del ejercicio. Y, sobre todo, nunca lo olvides: ante la mínima sospecha de que pudiera haber una lesión consulta con tu médico.